Todo el mundo puede recibir una sesión de sanación energética, siempre y cuando la persona esté interesada y dé su consentimiento para recibir la terapia. 

El libre albedrío es inquebrantable.

Si estás embarazada, también puedes y además, tu bebé se beneficiará de la sanación y será un auténtico regalo para su alma.  

Sinceramente, no lo sé. Esto depende de la sensibilidad de cada persona, pero es posible que, según mi experiencia, notes el movimiento de la energía en tí, te lleguen imágenes y/o recuerdos, te relajes profundamente e incluso te duermas.  Mi recomendación es que fluyas sin expectativas.

Esto depende del sistema energético de cada persona y de la sesión que se realice, ya que el movimiento de la energía puede ser en mayor o menor medida.

Por lo general y según lo que he ido experimentando tanto en mí como en las diferentes mujeres que he atendido, es normal sentirse relajada y en calma, con menos pesadez y con sensación de bienestar. A nivel físico, y debido al reajuste energético, puede sentirse molestias digestivas, náuseas, dolor de cabeza, cansancio, aumento de la orina.. esto puede suceder durante las siguientes 24/48h. 

 Esto ocurre como crisis curativa.

¡Dedicarte este tiempo exclusivamente para tí! ¿Suena maravilloso, verdad?

Una vez estés sola y tumbada (recuerda, sin interactuar con nadie durante la sesión) podrás estar en estado de meditación, dormir, escuchar música e incluso leer. Lo importante es que tomes conciencia del proceso que se está realizando. 

Es necesario retirar cualquier tipo de objeto metálico (anillos, pendientes, pulseras...) y para la limpieza energética también habrá que retirar cualquier tipo de mineral que se esté usando.

La sanación energética no es una ciencia exacta, y esto por experiencia propia, ha sido un aprendizaje para mí, el entender que las cosas no suceden cómo y cuando el ego quiere. Todo se da para el máximo bienestar y evolución de tu alma. He aprendido a fluir y dejarme ser, porque los resultados se darán en su justo momento y a su debida manera. Es importante tomar conciencia de cada avance, ya que en ocasiones tenemos el foco en algo concreto y no nos damos cuenta de los cambios que se han ido sucediendo durante el proceso.

Una vez dicho esto, puedo decirte que hay personas a las que les sucede cambios a las pocas horas de finalizar la sesión, otras que los han sentido a los días o semanas, y otros casos que requieren más tiempo. 

En resumen: Fluye, suelta expectativas, agradece y celebra cada paso en el camino.

Antes de empezar, protejo y elevo mi energía para abordar la sesión y acompañarte en el proceso en condiciones óptimas tal y como te mereces.

Una vez que conecto con tu energía, solicito a mis guías y seres de luz que me acompañen y me asistan durante toda la sesión.

Sólo me limito a ser un canal de luz para que la sanación se produzca a través de algo superior a mí.

Debido a la sensibilidad que he desarrollado, en ocasiones puedo percibir las emociones, malestares físicos y bloqueos de la energía de la consultante, pero no es información que proporcione al finalizar la sesión a no ser que lo sienta y considere oportuno para una toma de conciencia durante el proceso.

Por respeto a mi tiempo y a tu proceso, se podrá modificar la fecha y hora si se avisa con al menos 24h de antelación. En caso de modificarla por segunda vez, la sesión se dará por realizada, salvo por causa de fuerza mayor justificada.

Si te surge cualquier otra duda que no esté aquí reflejada, puedes ponerte en contacto conmigo y la resolvemos.